Wesly Rojas Cordero
Para los niños y niñas, en edades tempranas, el entorno familiar es su primer ambiente de aprendizaje. Es en el hogar donde, por medio de la interacción con sus familias, se inicia el proceso de las competencias emocionales y de la socialización, lo cual, tiene un impacto en el desarrollo de los niños y niñas a lo largo de sus vidas.
Autores como Baumrind (1967, 1968, 1970), citado por Henao y García (2009), han establecido la existencia de una conexión entre la relación parental y ciertas características sociales y emocionales de los niños y niñas. A partir de este planteamiento, Henao y García (2009) realizaron una investigación acerca de "las relaciones existentes entre el estilo de interacción familiar y el desarrollo emocional de los niños y niñas focalizado en la comprensión emocional, la empatía y la autorregulación" (p.787).
En dicha investigación, realizada por Henao y García (2009), se explica que los padres son un pilar para la formación y desarrollo de los componentes emocionales infantiles. Además, agregan que una interacción donde exista un control firme, pero acompañado de demostraciones de afecto, amor y comprensión hacía los niños y niñas (lo que las autoras dominan como una estructura parental de "estilo equilibrado"), son las que mayormente favorecen el desarrollo emocional de los niños y niñas, pues les permite obtener estabilidad, conciencia de sus emociones, responsabilidad, comprensión emocional y una mayor empatía; lo cual favorece también las habilidades sociales.
Po otra parte, se explica que una interacción punitiva o rechazante por parte de la familia, provoca en los niños y niñas inseguridad, sentimientos de abandono, y estados de depresión.
Referencia bibliográfica:
Henao, G. y García, M. (2009). Interacción familiar y desarrollo emocional en niños y niñas. Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, 7 (2), pp. 785-802. Centro de Estudios Avanzados en Niñez y Juventud Manizales, Colombia
Desde mi punto de vista y como bien se sabe, el hogar es la primera escuela, por esto me parece muy importante cómo aquí se rescatan las interacciones desde el hogar siendo estas fundamentales para el desarrollo afectivo de los niños y niñas, añadido a esto resalto la necesidad de ejercer una autoridad balanceada, una donde los niños se sientan seguros y respetados, pero donde a su vez haya límites y reglas claras.
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