miércoles, 18 de noviembre de 2020

Inclusión y Juego en la Infancia Temprana

Nahomy Solis Cruz


Parte fundamental del ser humano es el juego, es una necesidad vital, que contribuye con el desarrollo de habilidades y potencialidades cognitivas, sociales, psicomotrices, emocionales, comunicativas, espirituales y estéticas; a su vez, transmite cultura, permite expresar, recrear y transformar la realidad de quienes lo viven, generando cambios en situaciones y comportamientos hacia la convivencia y la ciudadanía. Si bien queremos que los infantes puedan ver satisfechas sus necesidades inmediatas y además mejorar su realidad, es valioso sensibilizar y concientizar a la población en general sobre el carácter que representa el juego en ese desarrollo óptimo.

El juego implica crecer y formar la personalidad, por ello es la estrategia más natural que encuentra el niño para aprender, descubre habilidades para representar y explorar el mundo, además en situaciones con niños que presentan discapacidad funciona como estrategia de integración social, el niño interactúa, se conecta y se relaciona con otros, en una situación de placer y a su propio ritmo, ellos reconocen así que las diferencias son naturales, y estas solo van a tomar el tamaño que nosotros les brindemos, por ello asumir los retos de la educación y crianza de niño y niñas con alguna discapacidad debe ir encaminada a la promoción de posibilidades equitativas para todos, y que mejor posibilidad que ser libre de prejuicios y temores en los momentos de disfrute lúdico.

Además, este medio de interacción sigue siendo una de las mejores formas de conocer y conectarnos con los demás, pues el juego espontáneo está lleno de significado porque surge de procesos internos que, aunque los adultos no entendamos debemos respetar; observando éstos descubrimos sus adquisiciones evolutivas, sus inquietudes, sus miedos, aquellas necesidades y deseos que no pueden expresar con palabras y que encuentran salida a través del juego. Es por esta razón que el juego se vuelve una necesidad prioritaria de la educación en la primera infancia; así como lo son el espacio apropiado, seguro para ello, y el material que favorezca esta actividad, sin olvidar que nuestra trascendencia puede cambiar el destino que los niños y niñas fuera de las aulas también.

Termino con esta frase: "El humano sólo juega cuando es libre en el pleno sentido de la palabra y sólo es plenamente humano cuando juega" –Friedrich Von Schiller, me hace reflexionar sobre ¿cuándo fue la última vez que jugamos por el mero hecho del placer que plantea jugar? A menudo, relacionamos el juego como algo exclusivo de la infancia y sólo pertinente a esa etapa vital, pero ellos también aprenden al observarnos, y no hay que olvidar cuando estuvimos en sus zapatos, si queremos niños felices, empecemos por ser felices con ellos, desde lo que mejor saben hacer naturalmente.  

 

 

Referencia Bibliográfica: Zúñiga, F; Granada, M & Pomés, M. (2018). Inclusión y Juego en la Infancia Temprana. Revista latinoamericana de educación inclusiva12(1), 181-198. https://dx.doi.org/10.4067/S0718-73782018000100181  

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Quiénes somos?

Despliegue la ventana para conocer más acerca de las personas que integran este Blog, así como sus datos de contacto.