Isabela Llansó Monge
El 2020 fue un año retador para todo el mundo, desde distintos aspectos. Gracias a estos retos y todas las dificultades vividas, puedo decir que ha sido el año que más nos ha enseñado. Hoy, cerca de finalizar un año lectivo fuera de lo común, reconozco las 10 lecciones que me dejó el 2020:
- Se puede innovar en estrategias de enseñanza-aprendizaje de la noche a la mañana.
- Sin el apoyo de las familias, no se puede garantizar un aprendizaje real.
- El salario nunca va a ser suficiente para todo lo que hacemos, pero el amor y gratitud también paga.
- La tecnología no es mala para los más pequeños, solo debemos utilizarla de la forma más positiva posible.
- Lo académico no es lo principal, primero el bienestar, seguridad, salud y luego los demás aprendizajes.
- Sin flexibilidad, no se puede enseñar.
- El amor, la paciencia y la entrega deben estar en todo momento en el aula, si no están, entonces mejor salir de ahí.
- El planeamiento no es más que una idealización de la clase, lo que realmente pasa depende de la disposición y ganas de los niños, niñas y docentes.
- Se puede recibir y enviar cariño, comprensión, apoyo y empatía mediante una pantalla.
- Nunca se debe subestimar a los niños y niñas, lo que no han logrado en bastante tiempo lo pueden mostrar en el momento menos inesperado.
Estas fueron las principales lecciones que me dejó el año lectivo este 2020, pero principalmente me demostró que amo lo que hago. Espero que todas las personas que lean estas lecciones hayan aprendido muchísimo al igual que yo y que siempre siempre disfruten su trabajo.

Me parece muy valioso tu aporte Isa, definitivamente este año nos ha dejado una gran cantidad de lecciones; básicamente nos ha permitido observar la vida desde otra perspectiva y cuestionarnos muchos aspectos. Pero sin lugar a duda, creo que este año nos ha permitido crecer y ser más fuertes.
ResponderEliminarMuy cierto, Vale. ¡A rescatar lo positivo que hemos aprendido!
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